El silencio como resistencia
En sus mejores cuentos, contenido en El exilio y el reino, Albert Camus narra una huelga de obreros en plena crisis, los proletarios resisten con dignidad, pero finalmente deben admitir la cruenta derrota y deciden no volver hablar con el capitalista.
Además de la magistral descripción de la fábrica y principalmente de los arquetípicos personajes, Camus destaca cómo la ausencia de la palabra marca la insumisión frente a la autoridad mandante. Los mudos, es sin duda un relato que pone al desnudo la iniquidad de la explotación burguesa y las miserias generadas en un perverso sistema, alienante.
Una novela argentina de la escritora Norma Huidobro, titulada Un lugar desconocido, cuenta las desventuras de mujeres del noroeste que viven en La Puna rodeadas por la desolación, víctimas del patriarcalismo y su terrible secuela de humillaciones.
Un oscuro visitante busca descubrir en esas tierras yermas las huellas del pasado de una migrante forzada hacia la gran metrópoli portuaria, el taimado personaje intenta maniobras diversas, pero el hermetismo de esas mujeres plenas de antigua sabiduría popular lo derrota y queda con sus manos vacías.
Ambos relatos, el de A.Camus y el de N.Huidobro son vindicaciones de la dignidad de los oprimidos, a quienes se les arrebató el libre uso de la palabra.
Queda en evidencia cómo hay silencios que retumban más que muchas voces altisonantes pero huecas.
Hace más de tres décadas asolaron los chacales silenciando voces a pura brutalidad, pero los ecos de las dignas voces rebeldes resuenan a pesar del eco en la distancia y en el tiempo.
Carlos A. Solero
Miembro de APDH- Rosario
casolero_1@hotmail.com
Pérdida y recuperación de la palabra
Entre las nefastas secuelas de las últimas décadas en la Región, una de ellas fue el silenciamiento forzado de las voces disidentes que expresaban su oposición ante las injusticias sociales.
En efecto, el terrorismo de Estado llevó adelante una sistemática destrucción del pensamiento crítico, aniquilando vidas humanas, pero también destruyendo libros, diezmando bibliotecas populares, censurando expresiones de las ciencias y las artes y por supuesto a sus hacedores. Miles de muertos, desaparecidos, forzados al exilio externo o interno.
Una metódica campaña de vaciamiento cultural que iniciada en 1966 con la fatídica Noche de los bastones largos, continuó desde 1975 y tuvo su correlato en los años noventa.
Nuestros jóvenes, al igual que el personaje de la película de Eliseo Subiela, Últimas imágenes del naufragio”, fueron perdiendo el uso de las palabras y en su reemplazo les impusieron la chabacanería aliada a un Consumismo desenfrenado.
La Ley Federal de Educación, desestructuró la escuela pública, contando para ello con múltiples complicidades, generando analfabetos funcionales.
Son unos cuantos miles en la Región Argentina los jóvenes que no estudian, ni trabajan, no son ellos quienes eligen su triste destino, el perverso sistema los lanza hacia el abismo de la exclusión social. Tornándolos víctimas potenciales de las adicciones y el desamparo. Esta es una violencia no sólo simbólica, sino también concreta.
Es por eso tan importante la tarea de recuperar los espacios barriales de clubes y bibliotecas, la creación de los Bachilleres Populares. Para encarar la impostergable tarea que siguiendo a Paulo Freire podríamos llamar de recuperación de la palabra.
Palabras que impliquen una mirada crítica de la realidad social, para empuñar el destino en las propias manos.
Carlos A. Solero
casolero_1@hotmail.com
CRITICAS y REFLEXIONES
Correspondencia entre Carlos Solero y Julio C. Cupeta - Rosario/Buenos Aires-Región Argentina
Enviado por C. S.: miércoles, 25 de noviembre, 2009
Asunto: Reflexión de actualidad
Murallas y libertades
En estos días se conmemoraron las dos décadas que transcurrieron desde la caída del Muro de Berlín, este acontecimiento local, de carácter global marca de algún modo el fin de la llamada “Guerra Fría”. Aquella instancia de confrontación entre los bloques político-económico-militares encabezados por Estados Unidos de Norteamérica y La URSS.
Ahora bien, en las celebraciones por el derrumbe observamos algunas omisiones dignas de mencionar, por ejemplo, las matanzas perpetradas durante estos veinte años por estas potencias imperiales y capitalistas en diversas latitudes. Chechenia, Irak, Afganistán, Colombia, Ecuador, etc. Las disputas territoriales en las que juegan desde atrás como aliados y/o sostenes de bandos estatales en pugna como en el conflicto de Oriente Medio entre Israelíes y Palestinos, los múltiples enfrentamientos en las repúblicas africanas aprovisionadas en cuanto a logística y material bélico por EE UU, la Federación Rusa , China o países como Francia, Suecia, Italia, España y muchos otros que sostienen sus economías en la exportación de armamentos de alta tecnología hacia la periferia del capitalismo. Entonces es posible encontrar soldados pertrechados con materiales destructivos de última generación, rodeados de poblaciones famélicas que no acceden siquiera al agua potable. La caída del Muro de Berlín, más allá de su patético simbolismo, no sólo no ha significado más libertad para los pueblos del Planeta, Guantánamo y otros centros del terror persisten. La caída del Muro no ha sido más que otro artilugio para la distracción de las masas, propaganda mediática de por medio.
En uno de sus célebres ensayos contenidos en su libro Ni víctimas ni verdugos, afirmaba Albert Camus: “No se construye la libertad sobre campos de concentración, ni sobre pueblos sojuzgados, ni sobre la miseria obrera. No, las palomas de la paz no se posan sobre las horcas; las fuerzas de la libertad no pueden mezclar a los hijos de las víctimas con verdugos.” Y agregaba Camus: “La libertad no es un regalo que pueda venirnos de Estados ni jefes, sino algo a conquistar con la lucha solidaria de los oprimidos.”
Carlos A. Solero
Reflexión de actualidad- de J: C. C.
Estimado Carlos, en un sábado de descanso leo tus reflexiones y me llevan a los párrafos de Camus, y las palabras conquistar La Libertad con la lucha solidaria de los oprimidos. Por eso te pido que me digas si en la actualidad existe una mejor forma de concientizar a las sociedades humilladas. Por mi parte, opino que la condicionalidad de los procesos sociales por parte del capitalismo es muy grande y que deberíamos buscar una forma contundente de enfrentar este monstruo tan real. Las verdades son distorsionadas, omitidas, o llevadas a generalidades intranscendentes para hacernos creer que todavía existen principios de autenticidad política. La educación está condicionada y por ello no surgen rebeldes. Únicamente los hechos contundentes de la trágica deshumanización sentida en cada uno de nosotros nos llevará a la creación de un mundo solidario. Y me parece que no existe solidaridad porque se destruye la empatía con los otros, y el dolor de uno ya no se percibe en el otro. Por eso la gente cada vez piensa en su egoísmo material, pone rejas, corazas, y se revuelve en su individualidad. Mirá, la especie humana nació por mutaciones al azar y son saltos de genes anarquistas que formaron otras variedades de especie y así se llegó al homo sapiens, que ahora es el homo retragudus inmolatis (retrogradado e inmolado). Pero te digo que las formas de rebeldía hasta ahora sostenidas no hacen cambiar el status perverso de los poderosos. ¿Cuál será la forma? No lo sé pero opino que todavía seguimos siendo hombres de paz y, no de guerra. La resistencia, la unión con los que sufren, ayuda mínimamente pero no alcanza, Las especies cambiaron, cuando las condiciones no eran útiles para la supervivencia y debieron cambiar sus órdenes vitales por otras para sobrevivir a esas hambrunas o catástrofes terrestres. Existen indicadores de cambio en el pensamiento y tímidamente en la acción porque la gente se satura de perder su dignidad y gritan fuertemente a los que ostentan el poder. Bueno, quiero reflexionar, si puedo, contigo pero otros delirios opacos a esta altura del partido. Un abrazo
Julio C. Cupeta. Buenos Aires
Reflexión de actualidad- de C. S.
Querido Julio: Comparto tu análisis. En efecto, la educación considerada de modo integral, como nosotros lo hacemos está siendo algo así como un adiestramiento para la férrea competencia y la meritocracia. Nosotros planteamos la educación como un proceso de aprendizaje de saberes, que se realiza a lo largo de toda la vida para ser verdaderamente libres, como dice Paulo Freire “La educación como práctica de la libertad.”
El sistema de dominación, el capitalismo, en todas sus variantes: neoliberal, populista, dictatorial o democrática es una trampa mortal que busca aniquilar de continuo los instintos de insumisión y rebeldía en potencia en cada una y cada uno de nosotros. Como decía H. Marcuse sublimar los instintos rebeldes a través del consumo de mercancías, transformadas en fetiches a adorar y por los cuales dejar la vida
Es por eso que como vos decís no queda otra salida que un cambio profundo y radical por vía revolucionaria. Siento y pienso que a pesar de todo en algunos intersticios de la sociedad, anida la rebeldía y personas dispuestas a luchar por construir un mundo distinto, sin explotadores ni explotados, sin opresores, ni oprimidos.
Salud y anarquía. Un abrazo.
Carlos A. Solero
Rosario, lunes 30 de noviembre de 2009-
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